“El amor y la pasión por lo que haces, define la huella que dejas”

Fecha de Publicación
Abril 12 de 2021
Categorías:
Comunicación Social
Foto: Guillermo Arturo Patiño Mesa

“Siempre me ha gustado hacer el programa de las madrugadas, me gusta despertar a las 4 de la mañana saludar a la gente y estar con la gente, especialmente con los campesinos y a los que les gusta la música del campo”

Por: Natalia Paola Lugo Gómez.

Esta es la historia de Guillermo Arturo Patiño, un hombre de tez morena, cabello oscuro y estatura promedio, con una potente voz y regocijo absoluto. Es comunicador social y periodista con aproximadamente 30 años de experiencia, Arturo estudió periodismo en la escuela superior profesional INPAHU, también hizo sus estudios en la 

Universidad de los libertadores como comunicador social, luego de esto, se especializó en radio en la universidad JAVERIANA y así mismo en comunicación educativa en la UNIMINUTO, actualmente se encuentra terminando la maestría en comunicación en desarrollo y cambio social.

En medio de risas y alegría Arturo nos cuenta como ha sido su recorrido por el mundo del periodismo y también nos hace entender que con pasión y amor se pueden lograr los sueños. Inició su trayecto en el periódico boyacense llamado La tierra, ahí inició su proceso de aprendizaje y de recorrido por la labor periodística, tiempo después, fue jefe de prensa de la asamblea de Boyacá, luego en 1992 se vinculó en los procesos de radio comunitaria en el departamento, lidero el proceso de Radio semillas “emisora comunitaria” desde 1994 hasta el 2014. Radio Semillas fue fundada desde ceros, se formó con la comunidad y con las ganas de hacer un proyecto donde la sociedad fuese el eje central, actualmente se está construyendo la memoria de lo que fue el proceso de radio Semillas.

 Ha trabajado en la Gobernación de Boyacá como director de la unidad de radio y de televisión también se ha desempeñado como consultor del ministerio de cultura en procesos de radio y a esto se le suma una de sus pasiones, la docencia, trabajando en la Universidad minuto de Dios y en la Universidad de Boyacá.

Para este hombre soñador el periodismo narrativo ha sido clave para su desarrollo profesional, no solo le gusta escribir, también le apasiona recorrer los lugares de las historias que quiere contar, le gusta poder conocer la historia que lo rodea, mejor dicho, como dice él, le gusta echar pata y visitar el campo boyacense. “Me empecé a enamorar mucho de la radio y a vincularme con procesos de radio, mi mayor experiencia, mi mayor pasión y lo que más he hecho es radio y especialmente radio comunitaria”.

Uno de los proyectos más significativos fue Radio semillas, donde nació y se construyó parte esencial de lo que hoy es Guillermo, “Radio Semillas me permitió hacer lo que yo quería, lo que yo soñaba cuando estudiaba, me permitió colocar toda mi creatividad y talento para acercarme a la gente y poder construir este proyecto tan gratificante”, Guillermo es fanático de salir a las veredas a los hogares campesinos y asegura que nace en él una inmensa alegría el saber que puede compartir con ellos un tintico, ordeñar juntos una vaca, aprender a hacer un cuchuco y respirar del aire frio y penetrante de una madrugada en Boyacá. La radio no es solo instrumentos, equipos y estudios, la radio son las personas y las historias significativas que hay detrás de cada uno de los individuos, mientras haya gente que le dé vida a las emisoras hay radio para rato.

Tirando la mirada por otro lado sabemos que en la vida nos ocurren cosas buenas como malas y en este caso Guillermo no fue la excepción. Con un tono irónico y una sonrisa nerviosa él nos relata como en enero del año 2000 sufrió una difícil situación. Un día, se encontraba en su cabina de radio haciendo su programa matutino, pero aconteció que la emisora dejó de sonar y él sin preocuparse esperó, pensando que había sido un daño de luz, pero al ver que transcurrían las horas y el problema no se arreglaba decidió enviar a un joven a ver que estaba pasando. Cuando él llegó descubrió que los habían robado y que todos los equipos habían sido hurtados. Después de una noticia como esta, Arturo optó por tener calma y buscar soluciones, días más tarde, hicieron una radiotón en la comunidad, donde todo el pueblo aportó y mediante bazares y recolecciones se pudo recoger cuatro veces más de lo que tenían que recolectar y compraron todos los equipos necesarios para poder volver a trasmitir. Fue ahí donde se dio cuenta de que la comunidad es la que hace la emisora y la construye, sin ella no habría razón de hacerlo, nada la conformaría.

Pero como no todo son anécdotas, hoy Guillermo nos comparte unos tips que son fundamentales para cualquier persona que quiera hacer radio y le apasione el hecho de narrar todo lo que conforma una sociedad.

  1. Lo primero es sentir amor y pasión por lo que se hace, enamorarse de estar hablándole a las personas detrás de una cabina. Si usted no está enamorado de lo que produce las cosas no le van a salir bien y eso se va a reflejar en lo que escribe y en lo que dice.
  2. Haga lo que haga nunca pierda su calidad humana y tampoco pierda de vista que usted es una persona ética y con valores. Tener objetividad es fundamental, pero se tiene que tener en cuenta que es muy difícil tenerla debido a que somos humanos y sentimos las cosas, los momentos y los acontecimientos, por esto es primordial que usted no pierda su calidad, su humildad y su esencia para que la opinión personal que usted manifieste no le afecte a nadie.
  3. El deber como periodista es hacer protagonista a las personas y no vanagloriarse usted. Está muy mal dicho que el medio de comunicación es la voz de los que no la tienen, la voz es del pueblo porque ellos tienen todo por contar, la radio solo es el recurso que facilita los escenarios para poder difundir estas historias.
  4. Se debe combinar muy bien lo ético y lo estético. Es de consideración que usted no diga mentiras, no abuse de los asombros, no invente cosas, no especule y tenga siempre sus fuentes a la mano. Es fundamental que, de información veraz es preferible dar la información un poco tarde, pero que se tenga la convicción de que es certera y confiable.
  5. Sea creativo, no haga lo mismo que hacen los otros y arriésguese a crear cosas nuevas colocando su sello personal.

Finalmente, Guillermo nos deja muchas enseñanzas, pero una de las más importantes es que con amor y perseverancia los sueños y proyectos se logran y que por más dificultades que se atraviesen en la vida siempre hay que ponerles la mejor cara a los problemas y afrontarlos con paciencia. Por último, nos indica que para ser un gran locutor lo único que se necesita sentir es deseo por comunicar, escuchar e interactuar con la sociedad.                                         

                 

Compartir