Iza: Nido dulce de Boyacá

Fecha de Publicación
Octubre 05 de 2020
Categorías:
Comunicación Social
Esponjado de limón

La cultura se manifiesta en innumerables formas creativas de expresar las vivencias de una comunidad de abundante riqueza histórica y gastronómica. Esta última, resulta una experiencia fascinante que merece el reconocimiento a nivel nacional.

 

Por: Camilo Méndez 

Tradicionalmente, la cultura se manifiesta en innumerables formas creativas de expresar el pasado y vivencias de una comunidad de abundante riqueza histórica a través de los relatos, la música, la danza, la literatura, la pintura, la arquitectura, la escultura y por supuesto la gastronomía que resulta una experiencia fascinante y unificada de estos procesos de enriquecimiento para quien se dispone a conocer el mundo mediante los sabores y sensaciones resultantes de un deleite culinario.

Esponjado de Kiwi - Foto: Camilo Méndez

Esponjado de kiwi - Foto: Camilo Méndez

Fundada en 1556, Iza protagonizó un panorama inconfundible de biodiversidad extensa. Campos verdes y paisajes equiparables a un paraíso terrenal de suelos prósperos; por este motivo, el municipio mereció el título de ‘Nido Verde de Boyacá’ designación otorgada por Manuel Ancízar en 1850 a lo largo de su travesía corográfica, dirigida por Agustín Codazzi. 

Postre de frutos rojos - Foto: Camilo Méndez

Postre de frutos rojos - Foto: Camilo Méndez

Los 123 municipios que componen Boyacá, gozan de un patrimonio cultural inconmensurable, distribuido a lo largo y ancho de la región, donde todos y cada uno de ellos, se distingue en la elaboración de un producto insignia que se establece como identidad para sus habitantes; en este caso, la elaboración y distribución de sabrosos postres y manjares en Iza, marcaron un antes y un después dentro de sus principales fuentes de ingreso.

Postre de melocotón y piña - Foto: Camilo Méndez

Postre de melocotón y piña - Foto: Camilo Méndez

Es imposible hablar de Iza, sin imaginar el colorido y sabroso aspecto de sus espacios gastronómicos destinados a la repostería, aunados a la amabilidad y hospitalidad de su gente, simplemente preguntándose ¿Qué probaré hoy?, las posibilidades parecen nunca acabar.

Foto: Camilo Méndez

Anterior: Merengón de guanábana // Superior: Leche asada // Posterior: Esponjado de maracuyá.

Izanas e izanos cambiaron su perspectiva minera y ganadera por mantener viva la costumbre de reunirse en familia, a preparar exquisitos manjares ya olvidados en los viejos recetarios provenientes de generaciones pasadas. Esto, para ellos representó una nueva manera de generar recursos económicos. Reinventando e innovando sus preparaciones lograron ganarse un lugar especial en el corazón de los comensales, lo que llevó a Iza a convertirse en punto estratégico turístico y paso obligado para los viajeros que acuden a la Laguna de Tota.

 

 

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