ENTRE MÁS ABEJA, MEJOR

Fecha de Publicación
Febrero 18 de 2021
Foto: Javier

Las clases virtuales, han demostrado, una vez más, que en Sudamérica se tiene una cultura de “malicia indígena” cosa que ha llevado a que nuestros niños no sean bien educados.

Por: Javier Hernando Camargo

Según la RAE educar es desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, entre otros. Para poder desarrollar y perfeccionar dichas facultades es necesario un docente. ¿Qué hacer en tiempos de pandemia, para poder desarrollar y guiar de la mejor manera? María Fanny, es docente de matemáticas en el Colboy, de unos 45 años, estatura promedio y cabello corto, vive diariamente esta ardua tarea. Ella al igual que sus compañeros tiene que realizar sus clases, con la pequeña diferencia que el horario laboral se extiende.

“Educar virtualmente tiene aspectos positivos y negativos, un aspecto positivo es que se tiene diversidad de herramientas tecnológicas, llevándolos a un aprendizaje autónomo. Pero, existen distractores como el celular, que llevan a que el estudiante no de su 100%” afirma María. Ella es una persona muy dedicada, se esfuerza diariamente para poder transmitir sus conceptos y facultades, como cualquier otro docente le genera cierto estrés no poder desarrollar su labor completamente, debido a factores, entre ellos los padres de familia, además de los ya mencionados.

“Estamos en una sociedad donde nuestra cultura, en su mayoría, no genera responsabilidad en edades escolares, donde el que más “abeja” sea es más pilo, y eso se inculca desde los padres de familia, no dejando desarrollar los diferentes ejercicios y tareas para el aprendizaje de sus hijos” comenta.

Compartir