El poder de la información

Fecha de Publicación
Diciembre 13 de 2022
Categorías:
Comunicación Social
Periodista.

A nivel mundial, los periodistas han tenido que afrontar incontables agresiones y amenazas a diario, desde torturas, detenciones arbitrarias y secuestros, hasta campañas de desinformación y acoso contra ellos a través de redes sociales.

Por: Paula Andrea Hidalgo

A nivel mundial, los periodistas han tenido que afrontar incontables agresiones y amenazas a diario, desde torturas, detenciones arbitrarias y secuestros, hasta campañas de desinformación y acoso contra ellos a través de redes sociales. Por tanto, los comunicadores, profesionales de los medios informativos y periodistas, son los principales afectados a raíz de las consecuencias del poder de la información. 

Según una encuesta de la UNESCO sobre la violencia en línea contra los periodistas, este indicó que el 73% de las interrogadas declararon haber sido amenazadas, intimidadas e insultadas a causa de su labor profesional.

Pero, ¿por qué la violencia contra los periodistas? Pues, desde tiempos antiguos, la prensa ha sido fundamental para ejercer control sobre la sociedad y sus decisiones; y no solo es tentación totalitaria, porque eso de controlar lo que deben decir los medios masivos y cómo deben decirlo, es lo que provoca a todos los que, de alguna manera, tienen el poder y lo administran. 

Es por esto, que la política y la prensa han tenido una relación determinante para la historia de la sociedad y el periodismo. Ya que una de las prácticas favoritas de los dictadores es, precisamente, acorralar y oprimir a los medios de comunicación y a los periodistas, hasta obligarlos a cerrar sus distintos canales informativos, a exiliarse o a resistir hasta las últimas consecuencias. No obstante, la prensa, entendida como    e mueve a los periodistas y a sus medios, que es la convicción de que la libertad de expresión va a garantizar una democracia suprema. Porque, una democracia sin libertad de expresión, de prensa y de ser informados como sociedad, no existe.

Teniendo en cuenta lo anterior, es una cuestión de principios, asegurarnos y defender la libertad de prensa y expresión, además de oponernos a cualquier forma de censura abierta, ordenada, velada o sugerida por parte de personas naturales, jurídicas o del estado. 

Finalmente, la UNESCO también refuerza el ideal de fomentar la creación de medios de comunicaciones independientes, libres y pluralistas en todos los ámbitos. Entendiendo que, los medios cuyas características son esas, están contribuyendo no solo a fortificar la libertad de expresión, sino también al desarrollo sostenible, a la lucha por la paz, la erradicación de la desinformación y el respeto por los derechos humanos.
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